Por lo general, no se recomienda conducir hasta al menos 10 a 14 días después de la cirugía. Este tiempo permite que disminuya la molestia y mejore la movilidad del brazo. Antes de volver a conducir, debe sentirse seguro de manejar el volante sin esfuerzo y consultar siempre primero con su cirujano.

Deberá evitar actividades intensas que impliquen movimientos de los brazos durante varias semanas. Aunque caminar suavemente puede comenzar en las primeras etapas de la recuperación, la mayoría de los pacientes deben esperar entre 6 y 8 semanas antes de volver a hacer ejercicio o practicar deportes. Su cirujano le proporcionará un cronograma personalizado según el progreso de su recuperación.

El procedimiento quirúrgico suele durar entre 1 y 3 horas. La duración exacta puede variar según la cantidad de piel y grasa que se elimine y si se realizan procedimientos adicionales como la liposucción al mismo tiempo.

Para favorecer la cicatrización y reducir la hinchazón, se aconseja a los pacientes dormir boca arriba con los brazos ligeramente elevados usando almohadas. Dormir de lado o ejercer presión sobre los brazos debe evitarse hasta que su equipo médico confirme la recuperación completa.

La comodidad es fundamental. Elige prendas holgadas que sean fáciles de poner sin levantar los brazos — las camisas con cremallera o botones son ideales. También se te indicará usar una manga de compresión, que ayuda a reducir la hinchazón y a mantener la forma de la parte superior de los brazos durante la recuperación.

Por supuesto. Los procedimientos de lifting de brazos suelen realizarse junto con otras cirugías de remodelación corporal, como la abdominoplastia, el levantamiento de senos o la liposucción. Combinar cirugías puede ayudar a lograr resultados más completos, pero es importante hablar primero con su cirujano sobre la seguridad y la idoneidad.

Las fluctuaciones significativas de peso después de la cirugía pueden afectar sus resultados a largo plazo. Aumentar de peso puede provocar una acumulación adicional de grasa en los brazos, mientras que una pérdida de peso importante podría causar que la piel vuelva a caerse. Mantener un peso estable y saludable ayuda a preservar el resultado quirúrgico.

Por lo general, puede ducharse entre 3 y 5 días después de la cirugía, una vez que su cirujano confirme que es seguro. Es importante evitar el agua caliente, ser delicado al lavar cerca de las incisiones y secar el área con palmaditas en lugar de frotar. Siga siempre las instrucciones específicas de cuidados posteriores que se le proporcionen.

El procedimiento no está diseñado para eliminar las estrías, pero algunas pueden retirarse si se encuentran en la piel sobrante que se extirpa. Aunque no eliminará todas las estrías, muchos pacientes notan una mejora en la textura y el tono de la piel después de la cirugía.